Historias de sastrería

Carta de Irina, Rostov No. 1

Con el consentimiento del autor, la carta ha sido abreviada y dividida en fragmentos para facilitar la lectura. Las fotos del trabajo de costura del autor se insertan en la carta.

Gracias!

Hola Vera. Pedí tu primer libro por correo. Pedí más por inercia, ya que todos los demás en corte y costura, que compré antes, no surtieron el efecto esperado.

He estado en la profesión de costura por más de 20 años. Se graduó de una escuela vocacional ordinaria con un título en "confección de ropa exterior para hombres, mujeres y niños", es decir, un verdadero modisto de profesión.

Distribuido en el estudio de lujo de la empresa "Elegant". Teníamos una empresa estatal en Kryvbas en la época soviética (Nota de Olkhovskaya: más precisamente, una red de talleres de clase alta).

Ganado - un centavo. Y no porque no supiera coser, los precios eran miserables.

Queridos lectores y lectoras!

Comenzando mi carrera como escritora, ingenuamente quise que mis libros atrajeran a absolutamente todos: jóvenes y mujeres maduras, madres e hijas, profesionales y principiantes. ¡Pobre de mí! No funciono.

Si el énfasis estaba en la simplicidad, junto con las cartas sobre cómo te gusta la simplicidad de la presentación, recibí cartas que me regañaban por mi enfoque primitivo.

Para todas las niñas, el cofre de una abuela parece rebosar de riquezas impensables. También pensé que estaba escondiendo tesoros. Pero, habiendo madurado, me di cuenta que el pecho de mi vieja es pobre y guarda los sellos del sufrimiento y la pérdida vivida...